viernes, 11 de abril de 2008

Por momentos quisiera...

...ser una abogada en Nueva York y litigar con engreídos hombres de corbata muy seguros de sí mismos que no sospechan, ni siquiera imaginan que esa rubia linda de ojos enormes, sin flequillo, pero con el pelo largísimo se-la-recontrabanca. Gritar "objeción", escupir un "no más preguntas, señoría" y caminar triunfal dentro de mi trajecito súper elegante, oscuro y ajustado. Salir de la corte a zancadas, al ritmo del eco de mis tacos resonando en inmaculados pasillos.

No hay comentarios.: