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lunes, 14 de septiembre de 2009

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En quince minutos hay que ir a la escuela, cada mañana intento levantarme antes para preparar un desayuno nutritivo porque soy la madre de un nene de siete que cuando en el colegio le piden que escriba una composición lo hace en forma de poema y además juega al fútbol y grita los goles con mucha pasión.
En diez minutos hay que salir a la calle por primera vez en el día, por primera vez en la semana, porque aunque una quisiera quedarse acá calentita siempre hay motivos que te llevan afuera y los pelos al viento, los anteojos de sol aunque esté nublado y ya hay demasiada basura acumulada al lado de la puerta.
En cinco minutos.
Ahora.
Ya.

lunes, 29 de junio de 2009

PUM me quedo corta

La pelea fue por algo cotidiano, él no quería lo que había para cenar y decidió hacer huelga de hambre, indignado en su cuarto. Comí sola, oyendo pequeños pasos furiosos que iban y venían, su vocecita mascullando cosas como "ya vas a ver".
Un rato después, ya reconciliados porque el hambre puede más que un capricho y con la panza de nene llena, él deja caer una carta que tenía en la mano y pone cara de espanto. "No la leas, mami, no la leas". Con letra de niño toda mamarracho, leo igual: "Tevoiamatar. tonta", firmado por un tal Llan Citara. Él, angustiado, dice: "No es para vos". Le pregunto quién es Llan Citara. Explica que es un "personaje", alguien que inventó para "jugar a decir cosas". Le cuento que cuando estoy triste o enojada también escribo para que se me pase. Reconoce, finalmente, que la carta era para mi. Pactamos que de cena nunca más voy a hacer sanguches calientes, aunque haya elecciones, y que él va a seguir escribiendo sentimientos, incluidos los que son amenazas para su madre, siempre y cuando me los deje ver.
Ahora él está en la escuela y yo veo en la mesa del patio una hoja con un monigote con ropa de verano, arriba dice "yomevisto". Esta mañana lo obligué a ponerse gorro y bufanda. Llega en un par de horas a casa y lo espero con una merienda de golosinas, una caja de marcadores nuevos y un bloc de hojas blancas, listas para escrachar.

jueves, 21 de mayo de 2009

pum

lo oigo disparare a unas mariposas y con la voz número dos grita demonio, con la tres fígaro, con la dos otra vez demonio, con la uno espíritu y después hace como un alarido efecto gente que cae y fade out.

sábado, 16 de mayo de 2009

somos dos

buddy holly y los pasitos de él, que corre cortito por los pisos de madera como si fuera un percusionista exótico. morderse la uña del dedo gordo de la mano izquierda para pensar un segundo antes de seguir diciendo es algo que hacemos nosotros, la chica que escribe y el niño sabio que habita esta casa y explica que "el paraíso es un lugar súper hermoso y muy relajado".

domingo, 15 de marzo de 2009

Mi última nueva excentricidad:

Todos los días a las ocho le digo a mi hijo que se bañe, para que las nueve ya nos encuentren cenando y a las diez, sobremesa incluida, él esté en la cama, leyendo uno de sus libros y haciéndose cargo de apagar su velador antes de que yo termine de cepillarme el pelo, los dientes y me ponga el pijama porque a las once ya quiero estar tirada, la compu apagada. Muchas veces, incluso, me duermo antes de la medianoche, totalmente agotada.

martes, 3 de marzo de 2009

Escribir acá

Empiezan las clases, ahora tenemos horarios estrictos y el trabajo que da trabajo, todo se acopla. Anda. La primera vez de ese nene en un grado, en un patio con buffet, con un delantal de tres bolsillos que lo vuelven loco. Yo, que me destaco entre los oficinistas de Plaza San Martín, paso apurada hacia un bar con wifi y me acuerdo cuando el wifi para mí era otra cosa. Hace un marzo. El sol me acaricia la mollera, tarareo un tema moderno, pienso como en tetris todas las formas posibles de decir más usando menos. Palabras. Arranco y freno. "Pelearse con vos es como discutir con Spinetta". Me habla de ventanas y árboles, yo digo arañas, me declaro punk. (Risas). Empezaron las clases, los trabajos, el nene que yo hice tiene un delantal blanco y yo camino apurada por el centro del centro. Fue un día divertido, pero muy cansativo, resume y no suelta más prenda.