viernes, 31 de agosto de 2007

Ooooh, qué día tremendo tengo, me digo, pienso, advierto.

Una cosita más: la primavera me da alergia, sumado a que me cae mal la gente que se pone contenta por ella, pero eso no tiene que ver con mi mal rollo actual. Vamos, vamos finishela con el festejo por el sol y los pajaritos.
Sol que entra por la ventana, bar y veo:
una punta de tostado, el mordisco
tres dientes de nene clavados,
dibujados. Hay coca light sin tomar,
vasito de soda que trae de premio el cortado,
pocillo vacío, manchado,
sobre de azúcar sin usar, cerrado.

El calor atraviesa el vidrio; toca
mi brazo, el servilletero,
el coso amarillo con escarbadientes
y también el salero.

La mesa se mueve porque tiene
(como la cucaracha)
carencia de patas de atrás.
El nene rubio que es mío
mira abstraído las cosas.
Es mío, me digo, tiene mis cejas.

miércoles, 29 de agosto de 2007

Instantanea en el colectivo 64, miércoles 10 am, de San Telmo a Once

Las cejas dibujadas (ella)
en una perfecta curva depilada.

Puente (en la frente)
que deja pasar
ideas,
autos por Paseo Colón,
el buen gusto,
no sé.

lunes, 27 de agosto de 2007

Por momentos quisiera...

...ser una joven promesa, tan deliciosa que, al verme en el espejo, no pueda refrenar las ganas de guiñarme un ojo a mí misma, cómplice, porque yo sabría, como ningún otro ser viviente en el universo entero, lo bueno que es estar ahí dentro de ese cuerpecito divino.

sábado, 25 de agosto de 2007

Libretas: obsesionada con ellas

Tengo en uso, actualmente, cuatro y no podría decir que una sea más importante que la otra, porque todas lo son y cada una cumple una función CRUCIAL.

1. La Moleskine (la rayada, la nueva, porque la lisa la reservo para cuando me pinte el dibujo): esa la llevo a todas partes; es como mi laptop de papel y apunto ideas, escribo mini textos para usar después, o no, en otro lado. Sobre todo me sirve para exorcizarme de las imágenes cuando me asaltan.
2. El cuaderno PUMA (lo que no se comió el gato): Tiene hojas blancas a roletes, el tamaño ideal para descansar sobre mi escritorio y se la pasa al lado de la compu. Ahí escribo lo que planeo subir después a esta page y sí, me vale más si antes fue manuscrito.
3. Mi Pillow Book (que no está literalmente bajo la almohada, sino más bien en la mesita de luz, primer cajón y, oh, creo que estoy dando mucha información): Tiene delicadas hojas rayadas, un señalador que viene included y tapa dura. Ahí hago el relato de los días, pero muy en rándom, como para que la pluma esté siempre suelta, como aprendí leyendo a Bioy.
4. El diario de Fausto (oh, ese es mi retoño): es verde flúo y lo empecé durante el embarazo con la idea de dárselo un día para que conozca mi cabeza de los veintis, los treintis y así, de pronto, alguna vez de alguna forma podremos tener la misma edad. Y le cuento su historia, mi historia, la nuestra, bah.


Si usara etiquetas, acá diría: TODO ES PERSONAL.

jueves, 23 de agosto de 2007

Pros y contras de criar un retoño:
Pro: Es mi mini edecán, siempre dispuesto a alcanzarme ese cuaderno, esa birome lejana cuando estoy concentrada en algo, y es feliz de hacer el mandado, sólo a cambio de un "gracias" y, claro, indicaciones muy precisas.

Pros y contras de entrar en confianza:
Contra: se pierde el misterio.

Pros y contras de ser treintañera:
Pro: De verdad verdadera me considero "en mi mejor momento" (estética y mentalmente), además de que como mucho menos vidrio y, si se derrapo, no te vas a dar cuenta.

Pros y contras de alcanzar un poco lo inalcanzable:
Contra: Salen a la luz algunas pequeñas miserias que lo van haciendo otra vez menos real y ese brillo ya no enceguece (oh, eso podría ser un pro, si no diera tanta pena)

martes, 21 de agosto de 2007

Permuto

Gato gris símil plateado, realmente muy hermoso, de pelaje suave, joven (1 año) pero grandote, ya castrado, mimoso y experto cazador de moscas en vuelo. A cambio sólo quiero que un benefactor me libere de la culpa que caerá sobre mí después de asesinar a la mascota de mi hijo. Eso nada más. Lo permuto por tranquilidad de conciencia.
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Me comió un cuaderno, el desubicado. CUATRO PÁGINAS LLENAS DE IDEAS QUE ME IMPORTABA TENER AHÍ ANOTADAS. Ojalá se indigeste, ojalá que las hojas no le toquen el cuerpo cuando caigan.

lunes, 20 de agosto de 2007

Amor copypaste


De pronto uno se relaciona tanto por mail, GTalk, Twitter… que comienzan a existir nuevas conductas. Es un pecado posmoderno, una especie de evolución tecnológica pero romántica de las cartas manuscritas y notas cotidianas enviadas por mensajeros y/o correo postal que rigieron los vínculos hasta mil novecientos y pico que ahora vuelven, a mi gusto, mejoradas.
Me encanta esto de hablar en vivo, pero también necesito el por escrito; discutir ideas con otro epistolarmente. Rotunda y definitivamente siento que cada día hay más herramientas que suman, que aportan y, como todo queda en la inteligencia de quien las usa, me relajo y disfruto, participo activa y me dejo atrapar gustosamente en la eterna relectura de diálogos: maravilla que permite esta charla virtual continua.
Y de pronto, un mini gesto como encontrar una perla en el discurso del otro, seleccionarla, hacer copy y trasladarla con un paste a una respuesta de chat, de mail, a un Twitt a la vista de todos o, por qué no, a un post en mi page pasa a ser una demostración de cariño tan inmensa, como un “te quiero” tácito que sólo podría existir hoy, que de pronto uno se relaciona tanto por mail, Gtalk, Twitter… Esto es un loop: por cierto, se llama amor copypaste.

sábado, 18 de agosto de 2007

El colmo de los colmos

En versión Twitter, dice así:
Especial de La Maga para fin de año. Lindo. Bues, no: en vez de pagarles a los periodistas, les cobran. Sí, $1200. Lo juro: ¿qué pasó, Ares?

En versión que permita más de 140 caracteres, podría agregar, porque aún no puedo creerlo y ya que en TEA me enseñaron que el pez por la boca muere, algunos textuales de la nefásta gacetilla. Y dice:

La mítica revista cultural de los noventa, recuperada por su creador y director, Carlos Ares, convoca a un seminario de estudio, investigación y trabajo, dedicado a periodistas jóvenes con poca o ninguna experiencia laboral y estudiantes que se encuentren ya en el último año de estudios terciarios de periodismo o Ciencias de la Comunicación y quieran completar su formación con el desarrollo en la práctica de un medio profesional.
El grupo de investigación, redacción y trabajo funcionará como una redacción que se reunirá los días (tales, pero son tres), en (tal lugar, no voy a hacer prensa de esto), entre los meses de septiembre y diciembre de 2007.
(...)
Durante el desarrollo del trabajo, los periodistas deberán proponer y discutir las notas, los textos, crónicas, columnas de opinión, entrevistas, críticas y reportajes a publicar con el director y el resto de la redacción. Los artículos serán corregidos y valorados en conjunto. Un editor en jefe hará la revisión final.
(...)
El objetivo del seminario es desarrollar desde cero y en los hechos el plan de negocios, la administración, el análisis de los costos de producción, la idea periodística, el diseño, el archivo, los contenidos, las nuevas secciones, la relación con los anunciantes, el plan de lanzamiento y los mensajes publicitarios del número especial de La Maga que deberá estar listo para ser distribuido a mediados de diciembre de 2007.
La segunda época de la revista comenzará formalmente su actividad en marzo de 2008. Los participantes que se distingan por su trabajo en el seminario tendrán entonces la oportunidad de integrarse a la redacción profesional y colaborar en la publicación.

Las plazas disponibles para el Seminario son sólo 35.

Los interesados deberán enviar un texto de presentación de unas 40 líneas a la siguiente dirección: (que bien podría ser soyunladri@notelopuedocreer.com)
(...)
El costo del seminario es de 300 pesos por mes, desde septiembre hasta diciembre.
(...)

Dos inventos que, se me ocurre, ya deberían haberse hecho hace tiempo:

1) La máquina de teletransportarse (que funcione mejor que la de La mosca, claro), pero nada muy loco, viste: una cosa así, sencillita, tipo la función teleport en Second Life pero en la vida real.
2) Una pastilla que tomes antes de beber vino tinto y que te garantice que no va a aparecerte en el labio inferior esa raya violeta tan fea, que dura hasta el día siguiente y una la descubre ahí, al día siguiente, al lavarse los dientes y piensa, llena de pasta sabor menta y angustia, cosas como: "Oh, dios, y yo haciéndome la linda con esta boca de payasa".

jueves, 16 de agosto de 2007

Necesito ya, pero ya mismo

-Una camara digital.
-Un ama de llaves y un edecán.
-Un lavarropas de esos finitos y sino, bueno, uno cualquiera.
-Que Chapman venga de visita, para empezar.
-Una laptop y todo tipo de tecnología móvil.
-500 pesitos más por mes.
-Unas zapatillas blancas, bajas.
-Otras iguales, en negro.
-Una licuadora.
-Todos los libros que presté y nunca me devolvieron.
-Idem cedés (Nota: no prestar más libros ni cedés).
-Más espacio en la cocina.
-Esa pollera negra con la tira de tela estampada en simil vaca holando-argentina.
-Un patio más ancho.
-Que se quede mudo el gato.

miércoles, 15 de agosto de 2007

Adjetivos y comparación

*La mini escandolosa, efímera como una promesa de amor (se te ve la bombachita roja).
*Una pared blanca con manchas violetas, igual a moretones en la piel de alguien muy pálido.
*Un amante bien machito, parece que transpirara Colbert Noir.
*Una situación extravagante, tipo ir de bares, vos y yo, vestidos de Batman y Robin.

martes, 14 de agosto de 2007

Por cierto (Rándom)

* Puedo asegurar, jurar y demostrar que la amistad entre el hombre y la mujer sí existe, es posible y hasta es mejor que otras.
(Pero eso depende mucho del muchacho en cuestión, claro).

*A los fedes, rafas, gabys, barbys, rodos y guilles, si se los llama por su nombre completo suelen creer que uno está enojado con ellos, o algo así.

*Yo soy de esas que viven creyendo que saben leer los mensajes ocultos en el discurso del otro. Suelo acertar, lo que no colabora nada en realidad: Hace un combo fatal con mi paranoia de base (y ahí es cuando fallo).

domingo, 12 de agosto de 2007

Parte II

Tienen aspecto de "todavía no cumplí 30" y, si ya pasó, quieren olvidarse de eso o, si está por pasar, temen que llegue el momento. Así que van por la vida con actitú yo-me-como-el-mundo, pero la matizan con ropa campechana tipo camisas a cuadros, chombas salmón, jeans claritos, timberlands... Esos son los sebastianes.

Altos, bronceados siempre, de pelo tan lacio que se les sospecha planchita, se refieren a Nueva York con naturalidad, como si dijeran 'el otro día en... Olivos", se emborrachan con cerveza y suelen casarse con estelitas, pero calentarse con las roxanas... Esos son los nachos.

viernes, 10 de agosto de 2007

Ah! Me olvidaba

ODIO a la gente que manda mails con pedido de confirmación de lectura.

Cosas que no hago por principio (o colapsa el mundo)

1. Ir a Caballito, Flores y/o Floresta.
2. Viajar en colectivo a Belgrano en la semana durante el día.
3. Besar a mi madre.
4. Ir a bailar.
5. Concurrir a un evento lleno de gente que conozco "mas o menos".
6. Tocar extraños.
7. Saludar con un beso a alguien que recién conozco.
8. Seguir cadenas de mails o cualquier tipo de juegos "para adultos piolas" como (el peor ejemplo que viví) el amigo invisible obligatorio con compañeritas de una revista nefasta.
9. Decir "Yo tengo un blog".
10.Ir de visita a la casa de gente que quede a más de un colectivo (un colectivo y un subte, sí; un colectivo y un tren, también. Dos colectivos, NO).

jueves, 9 de agosto de 2007

Por momentos quisiera...

...amarte y que ames, intoxicarme con tu aroma, ser cursi y decirte una frase como "intoxicame con tu aroma" para que vos te rías de costado, tan moderno y despeinado, antes de dejar todo lo que estás haciendo para venir corriendo a darme uno de tus abrazos.

miércoles, 8 de agosto de 2007

Parte I

Las chicas que toman Coca Light, se hacen claritos y caminan tipi tapa por el microcentro, apuradas para llegar a la oficina después de su hora de gimnasio, su pecho erguido resalta la cadenita de oro, su carita bronceada en pleno julio... Ellas son las estelitas.

Las que lavan el calzón y lo cuelgan en la ducha, se les vuelve a mojar en el próximo baño pero la dejan ahí, pobre su bombacha solitaria, como un decorado de tristeza, esas que tienen en vez de una alfombrita una toalla vieja para salir de la bañadera y nunca la lavan, o lo hacen cada mes y medio, con suerte, y compran la comida de la semana en el maxi-kiosco de la esquina, de aspecto producido aparente pero las medias están corridas... Ellas son las marisas.

Las empleadas publicas que sienten que haber conseguido ese puesto es como una beca, que tienen dos décadas en su trabajo y, aunque quisieran casarse, tener hijos y nietos, juran que para ellas “trabajar es un descanso para el alma”, tienen un uniforme laboral inventado por sí mismas, que suele ser un pantalón tipo de traje y camisa entallada algo chica, maquillaje cargado y peinados complicados que se desmoronan con el paso de las horas... Ellas son las eugenias.

Las que trabajan de camareras porque de propinas hacen “más plata que trabajando un mes en un banco”, gustan de la noche y sus secretos, pero estando en el backstage, se vanaglorian de conocer el ingrediente secreto de todas las recetas, la cama de cada barman y hacen rally barrilete en los after hours, gratis, porque son colegas, "del gremio"... Ellas son las roxanas.

Las de jogging rosa o lila en sus horas libres, probablemente con bincha al tono pero de pantalón ajustado y remera vintage en horario de trabajo gastronómico que es “mientras tanto” se reciben de psicólogas, o “hasta que salga un bolo con continuidad”, suelen ser castañas de pelo brilloso, como para comercial de tintura, y tienen algún defecto que las hace aún más bellas... Ellas son las maras.

Próximamente, las lorenas, las marinas, las paolas, las lilianas y las natachas.

lunes, 6 de agosto de 2007

La señora del Laverrap me da miedo

Es una persona que conoce todas mis miserias, que sabe cuántas bombachas ensucio por semana, que puede dar fe del tipo de manchas que padezco.
Es alguien que cada vez que voy a dejar mi evidencia, comenta como al pasar si hay cambios en la cantidad de ropa que suelo llevar, o en el tiempo que dejo pasar entre un lavado y otro. "Qué pasa que traes sólo una bolsa", dice. "Te esperaba ayer", reclama.

Esta mujer, además, me saluda con un beso y modula un "Ho-la-Da-nie-la" cuando hago entrega o paso a retirar.

Me asalta un pensamiento cada vez: ella sabe algo, y me mira como diciendo "yo sé, yo sé". Suelo tropezarme de los nervios ahí adentro, en ese Laverrap tan chiquito y por demás cálido. Me perdió una media negra y me da pudor reclamarla.